jueves, 30 de abril de 2009

El tiro por la culata


Los saurios y los soles aztecas son lo mismo, aunque con diferente piel. Si no me creen, basta comparar al Edomex boy con el vociferante presidente dizque legítimo: ambos presumen sus pseudo logros pero cuando las cosas les salen mal, pues se hacen pendejos.

El gobernador Enrique Peña Nieto (PRI-nosaurio, como no) cacareó a los 4 vientos el tren suburbano como si hubiera puesto un huevo de oro. Pero cuando ocurrió el accidente, el hombre tardó 2 días en hacer acto de presencia. Casi lo mismo pasó con López Obrador: construyó a toda velocidad la línea 1 del Metrobus para poder presumirla en su campaña presidencial pero cuando surgieron los defectos provocados por las prisas, entonces el muy cabrón no dijo ni pio. ¿Y esta es la oposición responsable?

No hay comentarios:

Publicar un comentario