viernes, 24 de abril de 2009

El baile de las curules


Una cosa son los pleitos entre niños y otra muy diferente los pleitos infantiles entre adultos. Y peor aún es cuando esos pleitos son entre políticos, lo que provoca pena ajena y hasta pena nacional. El máximo dirigente perredista dijo que denunciará al niño maravilla del PRI, Enrique Peña Nieto, por ofrecer candidaturas a sus militantes a cambio de que se cambien a las filas priístas.

Yo me pregunto: ¿a que viene la queja del líder del PRD si en el Estado de México los políticos cambian de partido como nosotros nos cambiamos los calcetines? El que el día de hoy es del PRI mañana es perredista y viceversa, lo que deja en claro que la ideología les tiene sin cuidado: lo único que les interesa es satisfacer sus ansias de poder. Vaya una queja sin sentido, sobre todo si se considera que a final de cuentas, los perredistas no son más que priístas reciclados.

No hay comentarios:

Publicar un comentario