Priísmo ahumado

El libro de Carlos Ahumada, Derecho de réplica, ya está levantando ampollas en el seno del PRI-nosaurismo. Según Ahumada, el pago de 35 millones de pesos a cambio de los videos que desataron el escándalo le fue entregado por una comitiva de destacados dinos, entre ellos el babysaurio Enrique Peña Nieto.

Ni tardo ni perezoso, el niño mimado del PRI ya salió a desmentir tal afirmación, asegurando que no conoce a Ahumada y que sus declaraciones carecen de credibilidad “debido a su pasado”. La verdad, me cuesta trabajo creerle a este saurio: fue el ungido por el ex gobernador Arturo Montiel para sucederle en el trono del Edomex y todos sabemos la clase de fichita que es Montiel (mentiras al por mayor y corruptelas a granel son su marca personal).

Es más, el PRD planea denunciarlos a ambos corrupción a causa de esto. Y en cuanto a eso de la falta de credibilidad de Ahumada debido a su negro pasado, le diría al dino que tenga cuidado de no morderse la lengua, porque si de pasados vergonzosos se trata, pues su partido hasta debería ser declarado ilegal (ojalá y la Virgencita nos hiciera el milagro). En fin, que el asunto de los videoescándalos todavía no termina y tiene mucha tela de dónde cortar, aunque estoy seguro de que no favorecerá las ambiciones electorales del tricolor. Para el PRI, el futuro luce ahumado.